No siempre seremos librados del menosprecio de la gente, pero es legítimo orar para que Dios lo aparte de nosotros

Aparta de mí el oprobio y el menosprecio, porque tus testimonios he guardado. (Sal 119:22)

(LUNES 7)

El mundo, el cual está bajo el control del enemigo de nuestras almas, utilizará toda su influencia en los hijos de desobediencia para maltratar a los hijos de Dios. Muchos de estos maltratos están asociados a calumnias y degradaciones (oprobios), por lo tanto no debe parecernos cosa extraña que aquellos que andan en los caminos del Señor y que mantienen firme su testimonios como hijos del Creador, sean ofendidos, maltratados y menospreciados.

No podemos impedir que los demás nos digan cosas en nuestra contra, pero debemos cerciorarnos de que aquello que se diga en contra nuestra sea mentira. Debemos andar en luz a pesar de que el mundo esté en completa oscuridad espiritual. Nuestro Señor Jesús dijo que 11Bienaventurados sois cuando por mi causa os vituperen y os persigan, y digan toda clase de mal contra vosotros, mintiendo. 12 Gozaos y alegraos, porque vuestro galardón es grande en los cielos; porque así persiguieron a los profetas que fueron antes de vosotros. Mateo 5:11-12

REFLEXIONA

Lee nuevamente el Mateo 5:11-12 y analiza tu propia vida. ¿Estas demostrando con tu carácter que eres hijo de Dios? Por ser íntegro y leal a Dios, algunas personas están en tu contra? De ser así, no desmayes, continúa andando como un hijo de Dios a pesar de que todos estén en tu contra.

(MARTES 8)

Como pudimos reflexionar ayer, es habitual que los hijos de Dios sean menospreciados por aquellos que aún andan en oscuridad espiritual, y es normal que ese menosprecio te cause dolor.  Cuando te sientas herido clama por justicia a tu Padre que está en los cielos para que El, el juez justo, imparta justicia.

Si sientes pesada la carga de la vergüenza por parte de los demás, clama a tu Padre para que El te quite de esa situación tan penosa. El rey David clamó al Señor para que el verdadero Rey del universo le quite el oprobio y la base de su petición era porque David había guardado el testimonio de Dios. De la misma manera si andas en integridad y sientes pesada la carga de las ofensas, pide a Dios que te libere de tu carga.

REFLEXIONA

Si estás sintiendo el rechazo de los demás porque tratas de vivir conforme Dios te ha instruido en Su Palabra, qué deberías de hacer, acorde al Salmo 119:22?

(MIÉRCOLES 9)

No vivimos en tiempo de la ley de “Ojo por ojo y diente por diente”. Con ello, si alguien te ofende lo correcto y justo es que lleves tu causa ante Dios, y no tomes la justicia por sus propias manos, respondiendo con el mismo grado de ofensa que aquel que te ofendió.

En el Salmo 119:22 el Rey David, quien compuso este Salmo, con todo y el prestigio que tenía, fue ofendido por otros. La reacción de David fue llevar su causa ante su Dios para que sea Dios quien le imparta justicia. Por lo tanto, si estás siendo perseguido por el Señor u ofendido por el nombre de Cristo, tienes al mejor abogado a tu favor, nuestro Señor Jesús, quien intercede todos los días por los suyos.

REFLEXIONA

Lee nuevamente el Salmo 119:22 y reflexiona sobre tu propia realidad? Estás sintiendo oprobio? De ser así cu[al debería ser tu reacción conforme vemos en la Palabra.

(JUEVES 10)

Buscar refugio en el Señor es la mejor decisión cuando estamos siendo ofendidos o sufriendo el oprobio, sin causa o razón alguna. Elevar nuestra causa ante el Trono de la gracia es la mejor estrategia para ser libertado de la ofensa, solo que procuremos que las acusaciones que nos lancen estén fundamentadas en mentiras. David lleva su causa ante el justo Juez y el presenta su caso indicando que es inocente. David dice que él ha guardado el testimonio de Dios.

Aunque parezca contraproducente, cuando estemos sintiendo oprobio por causa del Señor debemos sentirnos en paz porque el juez justo impartirá justicia, y nade puede burlar a Dios.  Por lo tanto, la mejor manera de soportar la calumnia es orar a Dios para que sea El quien nos quite la afrenta, llevando ante Su Trono nuestra causa. Por calumnia y oprobio el enemigo de nuestras almas pretenderá desestabilizarnos, lo único que procuremos que sean mentidas todo aquello por lo cual somos vituperados, ¿por qué? Porque el juez justo llevará nuestro caso a una segura ganancia.

REFLEXIONA

Lee nuevamente el Salmo 119:22 y reflexiona sobra sobre lo que indica la Palabra de Dios en lo que respecta a soportar el oprobio.

(VIERNES 11)

El inocente que lleva su causa ante el Trono de Dios ciertamente recibirá justicia, porque Dios guardará a todos aquellos que guardan sus mandatos; por lo tanto la manera adecuada de enfrentar la injusticia de los hombres es orar a Dios para que elimine por completo esa situación que consume nuestras fuerzas.

Si tratamos de resolver el caso por nuestras manos puede que concluya en un rotundo fracaso, por ello cuando padezcas una difamación es preferible orar a Dios para que, si es su voluntad, Él nos libre del oprobio.

Si eres completamente inocente del cargo que se te acusa, derrama tu alma en oración a Dios para que sea El quien imparta justicia y no jueces humanos. Como hijo de Dios debes ir al trono de tu padre y exponer tu causa.

REFLEXIONA

Lee Salmo 119:22-23 y aplica esta situación a tu vida. ¿Cómo pedir al Señor por una causa en la cual eres inocente?